En el enfermo con leucemia pueden aparecer inapetencia, alteraciones del gusto, sequedad de boca, mucositis, náuseas, diarrea, estreñimiento y deshidratación para los que se exponen una serie de consejos:
Inapetencia:
- Hacer comidas pequeñas, frecuentes y ricas en calorías.
- Buscar alimentos atractivos al olfato.
- Limpiar la boca frecuentemente.
- Se recomiendan queso, galletas, batidos, yogur, helado. Enriquecer con leche en polvo todas aquellas recetas que utilicen leche.
Alteraciones del gusto:
- Utilizar cubiertos de plástico si los alimentos tienen sabor metálico.
- Hacer que otras personas preparen la comida.
- Reemplazar la carne roja con aves, pescado, huevos y queso.
- Emplear caramelos de limón sin azúcar, goma de mascar o pastillas de menta cuando se sienta un gusto metálico o amargo en la boca.
- Agregar especias y salsas a los alimentos.
Sequedad de boca:
- Realizar la higiene de la boca al menos 4 veces al día.
- Cepillar y enjuagar las dentaduras postizas después de cada comida.
- Utilizar enjuagues que no contengan alcohol o agua con manzanilla.
- Mantener agua al alcance en todo momento.
- Consumir alimentos y bebidas muy dulces o ácidos, los cuales pueden estimular la salivación.
- Emplear una pajita para beber líquidos.
Mucositis:
- Consumir alimentos blandos que se mastiquen fácilmente.
- Evitar alimentos irritantes como cítricos, alimentos picantes o salados y alimentos ásperos como verduras crudas o cereales.
- Cortar los alimentos en trozos pequeños.
- Comer los alimentos fríos o a temperatura ambiente.
- Comer antes del tratamiento.
- Comer alimentos secos tipo galleta.
- Sentarse una hora después de comer.
- Evitar comer en lugares con olores desagradables.
- Beber gran cantidad de agua a temperatura ambiente.
- Restringir el consumo de leche a 2 tazas diarias.
- Evitar bebidas gaseosas y limitar el consumo de legumbres y verduras.
- Comer más alimentos que contengan fibra periódicamente. La fibra debe añadirse de forma gradual y deben consumirse al mismo tiempo líquidos adecuados.
- Beber de 8-10 vasos de líquidos todos los días como el agua, el jugo de uvas pasas y jugos tibios.
- Realizar caminatas y ejercicio de forma periódica.
- Beber aunque no se tenga sed (de 8 a 12 vasos de líquido al día).
- Tomar alimentos como sopa, gelatinas y helados.
- Limitar el consumo de bebidas cafeinadas, ya que estos productos no son tan nutritivos como las bebidas que no tienen cafeína.
- Beber la mayoría de líquidos entre comidas para aumentar el consumo general de líquidos y sustancias sólidas.