La forma más simple de obtener una muestra de esputo es mediante la expectoración, para lo que la persona de la que se obtiene la muestra ha de toser con fuerza y escupir el esputo que ha hecho salir de sus vías respiratorias en el recipiente que se le habrá proporcionado al efecto. Normalmente se recogen tres muestras de esputo a lo largo de tres días. Es preferible que las tomas se realicen por la mañana, con el enfermo en ayunas. Antes de realizar la expectoración:
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Si el enfermo lleva dentadura postiza debe quitársela.
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Antes de realizar la expectoración conviene que el enfermo se enjuague la boca con agua a fin de que la muestra obtenida no contenga elementos contaminantes, como saliva y otros.
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A continuación, el enfermo ha de realizar tres o cuatro inspiraciones profundas seguidas de toses cortas y suaves. Finalmente, ha de realizar una inspiración profunda y toser con toda su fuerza sobre la boca del recipiente en el que se recoge la muestra.
Si el paciente es incapaz de expectorar por sí mismo, el personal sanitario recurrirá a técnicas para estimular la expectoración u obtendrá el esputo mediante técnicas instrumentales (lavado broncoalveolar, punción transtorácica...).
Una vez obtenida la muestra se ha de llevar con urgencia al laboratorio para su estudio. Si no es posible entregar la muestra con rapidez, se ha de mantener en la nevera hasta el momento de su entrega.
