El consumo regular de frutos secos puede reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares hasta en un 30%, según el INC (International Nut and Dried Fruit Council). Estos datos, extraídos del estudio PREDIMED ("Prevención primaria de la enfermedad cardiovascular con dieta mediterránea") apuntan también a la reducción en la incidencia de diabetes mediante el consumo de una ración diaria de frutos secos, lo que equivale a unos 30 gramos de producto.
El INC pone de manifiesto estos datos coincidiendo con el Día Mundial del Corazón, ya que las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de mortalidad en todo el mundo. En concreto, según la Organización Mundial de la Salud, en 2008 se registraron más de 17,3 millones de muertes en todo el mundo por esta causa que, según esta misma fuente, provocará cerca de 23,3 millones de muertes en todo el mundo en 2030.
"Debido a sus numerosas propiedades beneficiosas, los frutos son alimentos que además de de aportar nutrientes mejoran notablemente la salud y reducen el riesgo de padecer enfermedades crónicas", asegura Jordi Salas-Salvadó, presidente del INC World Forum for Nutrition Research and Dissemination. Asimismo, desde el INC recuerdan que el consumo regular de frutos secos ayuda a reducir el "colesterol malo" (LDL) entre un 7 y un 10%.
Propiedades y beneficios
Entre sus múltiples propiedades beneficiosas, diversos estudios científicos demuestran que los frutos secos, además, reducen el índice glucémico (IG), previenen la formación de coágulos y proporcionan mayor fluidez a la sangre, mejoran la función endotelial de los vasos sanguíneos, y poseen un efecto antiinflamatorio.
Unos beneficios que se atribuyen a los múltiples componentes que poseen estos productos tales como Vitamina E, ácido fólico, magnesio, arginina, esteroles vegetales, sustancias fitoquímicas y bajo contenido en ácidos grasos saturados, entre otros.