No se debe usar en caso de hipersensibilidad al propranolol o a otros betabloqueantes, bradicardia, shock cardiogénico, bloqueo auriculoventricular de segundo y tercer grados, insuficiencia cardiaca no controlada, hipotensión, acidosis metabólica, trastornos graves de la circulación arterial periférica, síndrome del seno enfermo, feocromocitoma no tratado, angina de Prinzmetal, tras un ayuno prolongado, historial previo de asma bronquial o broncoespasmo, y pacientes con predisposición a la hipoglucemia.