Se produce en la hipófisis, una pequeña glándula situada en la base del cráneo. Sus funciones son múltiples y su regulación compleja.
Produce un aumento de la glucosa y de los ácidos grasos en la sangre. También el crecimiento de las células del individuo (tanto en número como en tamaño), provocando el aumento de todos los órganos con capacidad de crecer. En consecuencia, la hormona del crecimiento facilita el aumento de talla hasta que los huesos se consolidan y pierden su capacidad de elongación.
Sólo se utiliza en algunos casos de enanismo que son debidos a una pobre secreción de hormona.